Cookies para una buena amiga compartidas con más amigos increíbles.
Receta facilísima para los adictos a las cookies y la mantequilla (soy una de esas).
70 g de copos de avena
210 g de mantequilla salada en pomada
100 g de azúcar glas
220 g de harina
1 cucharadita de levadura química ( para los ecológicos, si buscáis las hay también en formato eco)
100 g de chocolate
Calentar el horno a 150º.
Calentar el azúcar y la mantequilla hasta que la mezcla quede cremosa y ligera.
Añadir la harina, la levadura y los copos de avena y mezclar con los dedos hasta obtener una pasta bastante consistente.
Formar un cilindros de unos 10 cm de diámetro, envolverlo en papel transparente y dejarlo en el frigorífico 30 minutos.
Sacar el cilindro, cortarlo en rodajas de medio centímetro de grosor, colocar sobre papel sulfurizado untado de mantequilla o una tabla de silicona y hornear durante 15-20 minutos, hasta que la parte inferior de las cookies esté dorada. Sacar del fuego, dejar enfriar unos minutos sobre la placa y colocar después sobre una rejilla.
Cuando estén fríos, decorar con chocolate fundido.
Bon profit! Y felicidades Anna!
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