Si hace frío no puedo con los platos fríos y si hace calor no puedo con los calientes. Y con esta premisa tan simple esta semana como quien cambia de armario he decidido cocinar nuevos sabores frescos acompañando este tiempo que tanto me gusta.
Después de un largo invierno tomando muchas cremas, esta semana buscaba cocinar una crema fría y con cierto sabor veraniego.
Siguiendo con el lema de "solo cocinaremos con ingredientes de temporada", surgió esta crema de calabaza y naranja. Para mí toda una novedad. Deliciosa, fresca y como una amiga me dijo "solo quiero tomar litros y litros de esta crema", (me encantan todas las observaciones que me hacen, son dosis tremendas de buena energía. Amigos, ver como coméis y escucharos hablar de ello es un regalo).
1 calabaza pelada
el zumo de una naranja
sal
agua ( la pondremos al gusto según la textura más o menos líquida que queramos para esta crema)
Hacer un sofrito muy suave con la calabaza, cuando esté listo verter el zumo de naranja y dejar que haga chup chup unos minutos. Con cuidado rallar un poco de piel de naranja, intentar no coger la parte blanca ya que puede amargar. Y tirar el agua. Dejaremos que hierva tapado unos minutos. Lo trituraremos todo junto y lo guardaremos toda la noche en la nevera. Los sabores se habrán asentado y fresca es deliciosa.
Y de segundo plato lasaña de pasta fresca, como siempre, rellena de espinacas, puerros, salsa de tomate y queso ricotta.
Bon profit!
No hay comentarios:
Publicar un comentario